Propuesta económica presidencial, acertada pero incompleta

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• El IDH fue propuesto en 1990 por el Nobel de Economía, Amartya Sen.

• El CONEVAL mide la desigualdad del ingreso con el índice de Gini.

El docente e investigador de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC) Campus Chiapas, Julio César García Benítez, señaló que en lo relativo a su intención de dejar de usar al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) como una medida de bienestar y como un objetivo por sí mismo del desarrollo, así como del bienestar de la población, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, no se equivoca, pero su visión es incompleta, pues en México se necesita monitorear y analizar tanto indicadores de crecimiento económico, como el PIB, la productividad y competitividad así como indicadores de desarrollo y de desigualdad, como el Índice de Desarrollo Humano (IDH) y el coeficiente de Gini.

Sin embargo, el también analista de la EBC Campus Chiapas indicó que lo más importante, es hacer acciones desde el nivel gubernamental como privado para fomentar el crecimiento de la economía, generar más desarrollo y bienestar y distribuir mejor los ingresos que se generan en el país

Julio César García Benítez recordó que en fechas recientes, el presidente de la República, presentó el documento titulado “La nueva política económica en los tiempos del coronavirus”, donde hace referencia a dejar de usar al crecimiento del PIB como una medida de bienestar y como un objetivo por sí mismo del desarrollo y el bienestar de la población.

Dicho documento hace énfasis en que el crecimiento económico y los incrementos en la productividad y la competitividad no tienen sentido como objetivos en sí mismos sino como medios para lograr un objetivo superior: el bienestar general de la población.

Al respecto, García Benítez recordó que desde 1990, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) bajo el liderazgo del premio Nobel de Economía Amartya Sen, desarrollaron un indicador para medir no sólo el crecimiento, sino también el bienestar, al cual nombraron, Índice de Desarrollo Humano (IDH).

El IDH se basa en las personas, coloca la salud y la educación en un plano de igualdad con el crecimiento económico. Este indicador tiene como parámetros el 0 a 1 o (en su caso de 0 a 100) en donde más cercano a 1 el país tiene un mayor desarrollo o bienestar.

Julio César García Benítez también recordó que desde hace varios años el Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (CONEVAL), mide la desigualdad del ingreso con un coeficiente,  llamado índice de Gini, que se utiliza en México y muchos otros países.

Según este indicador, los últimos 10 años en México, el indicador ha mostrado una muy ligera reducción de la desigualdad de ingresos en el orden del 9% durante el periodo señalado.

Finalmente, el docente e investigador de la Escuela Bancaria y Comercial, señaló que sí existe al menos, una asociación entre el PIB el IDH, pero ésta no es perfecta, ya que también se puede observar que en la crisis de 1995 hubo una fuerte caída del PIB de -6.3, la cual no tuvo un impacto tan fuerte en el IDH, el cual se mantuvo constante en 0.67. Algo similar se observa en la crisis financiera de 2008-2009.

El porcentaje de participación en el ingreso del 20% peor remunerado de la población, en comparación con dos países que pertenecen a la OCDE y Argentina, que es de tamaño similar a México, se observa es que si bien ha crecido ligeramente en los 8 años al pasar del 4.1% al 5.1%, está lejos de tener la participación que tienen en Alemania o inclusive España, los cuales tiene una mejor distribución del ingreso.