Raciel López Salazar, ex fiscal general de Chiapas, fue abucheado y sacado de la oficina en que "se escondía" de los enardecidos policías estatales de Puebla que lo quieren fuera de la Secretaría de Seguridad Pública, a la cual dirige. Apenado caminó hacia su auto e intentó disimular su temor y enfado con una tímida sonrisa. Es que los gritos de "Fuera Chiapas, fuera Chiapas", le calaron hondo,
Raciel López Salazar, fue delegado de la Fiscalía General de la República en el Estado de México hasta febrero pasado, y relevó a Miguel Idelfonso Amézaga Ramírez como secretario de Seguridad Pública (SSP) de Puebla.
Su nombramiento se dio en medio del caso de los tres estudiantes universitarios y un conductor de Uber asesinados en Huejotzingo, homicidios que hicieron eco en el país.
López Salazar inició como procurador General de Justicia (PGJ) de Chiapas de 2009, en el gobierno de Juan Sabines Guerrero, y en 2012, cuando estuvo en el mandato Manuel Velasco Coello, fue ratificado.
En 2012, pidió licencia para buscar una diputación federal cobijado por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), pero fue derrotado por Morena, así que regresó al cargo.
En 2017, al pasar de Procuraduría a Fiscalía, continuó al frente de la FGE, donde estuvo hasta diciembre de 2018 cuando renunció.
El 3 de abril de 2019, el originario de Tonalá fue designado como delegado de la FGR en el Estado de México, donde se ostentó hasta febrero para irse a Puebla a la SSP. Ahora ya no lo quieren y todo parece indicar que será destituido, tras el paro laboral de los policías.
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