REFORMA / Al edil le importa más su ego que la salud de los pobladores

• Obligó a empleados y a beneficiarios de una obra asistir a una inauguración sin respetar el protocolo de la nueva normalidad.

En un acto por demás irresponsable y que atenta contra la salud de las personas, el alcalde de Reforma, Herminio Valdez Castillo, exigió a sus empleados, a los beneficiarios y familiares de éstos a asistir a un acto inaugural al parque de esta ciudad.

El alcalde de Reforma obligó a concentrar a más de 300 personas en tiempos de coronavirus, algunas de ellas sin cubrebocas, sin respetar la sana distancia y con la finalidad de ir a inaugurar una obra por demás repudiada por la mayoría de la gente del pueblo, ya que esta obra redujo una amplia calle y le quitó vista al parque central.

Se trata de la obra que el alcalde denominó corredor gastronómico, pero la gente en burla y venganza le llaman “los gallineros”, por las dimensiones que tiene.

Esta obra se realizó con dinero que Pemex otorga a este municipio petrolero, pero sin embargo el edil la presume como erario de la comuna.

En esta inauguración -la cual ocurrió este sábado al medio día- el alcalde exigió a todos sus empleados a asistir a esta inauguración, de lo contrario podrían ser despedidos y a los beneficiarios de los puestos les pidió asistir con su familia, en donde se podían ver niños y personas de la tercera edad.

Un empleado que pidió guardar el anonimato señaló: “tengo a mi madre y a un hermano enfermo de coronavirus en mi casa, yo no presento síntomas, pero aun así sé que debo de guardarme en mi casa, le explique a la persona que nos pidió que debíamos llegar, una tal Dulce Quintero, mi situación, y me dijo que eran órdenes del presidente, que si no iba me corrían y por miedo a que me corran tuve que llegar. Si infecto a alguien y por mi culpa muere alguien, quedará en la conciencia del presidente, y esto es una irresponsabilidad ya que sé que también tres de mis compañeros que tienen coronavirus fueron también obligados”.

En redes sociales, usuarios recriminaron al alcalde esta acción derivado a que los fines de semana, a través de la dirección de Reglamentos, obliga los negocios a cerrar a la una de la tarde y el que no obedece los clausura y les impone severas multas, señalando que si se trata de amigos o compadres ahí si se hace de la vista gorda.