Los pedazos de repello esparcidos por doquier y la barda inclinada son un claro indicio del peligro que se cierne en el lugar, para peatones primeramente, y segundo para los alumnos de la escuela CETIS 138, cuando regresen a clases. Por eso padres de familia elevan su voz en exigencia de una pronta reparación.
La cinta plástica luce reventada. La acera estuvo acordonada por Protección Civil para impedir el paso peatonal, pero caminar sobre el libramiento Norte es más peligroso por los autos particulares y sobre todo colectivos, que pasan a toda velocidad sin consideración al peatón, por lo cual los transeúntes prefieren circular sobre la acera, con el riesgo de que la barda caiga en cualquier momento.
El letrero colocado con pintura color amarillo advierte sobre eso: “Precaución, no pasar, puede caer”. Y si bien el riesgo para peatones es latente, a los padres de familia les preocupa que se acerca el retorno a clases presenciales para el ciclo escolar próximo. En el plantel vecino, Cobach 33, ya reiniciaron.
“Deben aprovechar ahorita que no hay clases, porque esa barda se tiene que tirar y rehacerla, ya está muy inclinada y reparada no va quedar”, dijo Humberto Martínez, que tiene a su hija estudiando en dicha escuela. Egresará el próximo año.
No hay comentarios:
Publicar un comentario