• Hicieron un cerro artificial y siguen rellenando con escombro, sepultando árboles vivos y poniendo en peligro inminente un fraccionamiento que está en la zona baja”
El material que extraen del sitio aledaño al Colegio la Paz se llama “mejorado”, pero en realidad están empeorando el lugar. Y de paz solo quedará el nombre del colegio, porque se prevé una escalada de siniestros a causa de la alteración del suelo. El accidente del camión Volteo es apenas la punta del iceberg, asegura un automovilista.
El tráfico vehicular fue caótico durante horas ayer en el tramo Tuxtla- Copoya. Y aunque antes de ponerse el sol todo volvió a la normalidad, en realidad el peor caos está por venir de no atender de fondo el problema que subyace, suelta a bocajarro un ciudadano analítico.
El camión tipo Volteo volcó en la pendiente. Unos dicen que iba subiendo y se le “murió” el motor, descendiendo en reversa. Otros afirman que descendía y se le fueron los frenos. Tiene más lógica la primera aseveración. Es que el material “mejorado” (que sirve para compactar el suelo) del camión accidentado, fue extraído al lado de las canchas de fútbol del colegio La Paz.
Esto se hace alterando el suelo de la zona. Con las futuras lluvias se deslavará y provocará una cascada de lodo sobre la carretera, muy probablemente, dice un ciudadano.
Un conocedor del lugar, afirma que frente a las canchas de fútbol del colegio La Paz, llevan varios años alterando el uso del suelo. “Hicieron un cerro artificial y siguen rellenando con escombro, sepultando árboles vivos y poniendo en peligro inminente un fraccionamiento que está en la zona baja”, afirma el testigo. “Además ahí se hace un escurrimiento de lodo sobre la carretera que pone en peligro a los automovilistas cuando llueve”, agrega.
Una cosa es segura. Como el camión accidentado ayer, todos los días suben y bajan camiones cargados con material, son muy viejos y sin el servicio adecuado, Van lanzando humareda negra a su paso. “Dios nos ampare si un día se queda sin freno o vuelca un camión de esos y agarra a un auto, sería una desgracia mayor. Deben vigilar a esos camiones que suben”.
Y de paz solo quedará el nombre del colegio aledaño, porque se prevé una escalada de siniestros a causa de la alteración del suelo.
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