Los huérfanos necesitan apoyo de la sociedad y protección precautoria de la autoridad.
La 4a. Cerrada en la colonia El Relicario, hizo honor a su nombre y estuvo cerrada al tráfico vehicular local, pero abierta a la ciudadanía para apoyar a los cuatro huérfanos.
Miguel Alejandro, el mayor, quien fue por su madre a bordo de la motocicleta "maldita", está inconsolable. Ahora es el hombre de la casa y también queda en lugar de madre.
No sabe qué hará, no sabe qué decir a sus hermanos. El futuro es incierto en todos los aspectos. Necesita apoyo económico para los gastos del velorio y sepelio. Necesita medidas precautorias, protección para él y su familia. La sociedad puede hacer lo primero; la corporación policiaca, lo segundo.
Familiares, amigos y vecinos de Paula exigen justicia. Claman porque esta muerte no sea sepultada en el polvo del olvido.
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