Una joven le tomó foto. Bajó con náuseas y decidida a no abordar la ruta 94.
"Fue asqueroso", dice la joven resumiendo la horrenda experiencia vivida a bordo de un colectivo de la ruta 94. Estaba tan molesta que no recuerda el número económico. Abordó la unidad y luego subió un hombre en presunto estado de ebriedad. "Visiblemente llevaba su miembro viril de fuera del pantalón, por encima del cinturón", dijo la joven denunciante. Para colmo se sentó justo frente a la jovencita. Al lado iba una señora y al otro lado un muchacho, que al darse cuenta de la situación volteó horrorizado. Los demás, aunque lo vieron, no dijeron nada.
"Algunos sintieron miedo, tal vez, por eso no dijeron nada, yo sentí mucho asco y rabia, molesta que ni el chofer ni el checador le hayan dicho nada. Deben estar más pendientes y no subir a personas en esta condición", dijo la denunciante.
Por lo pronto, la joven tomó la decisión de no volver a abordar una unidad de la ruta 94, pues teme que el individuo vuelva a subir al transporte en el que vaya a ella y que una vez más tenga el descaro y cinismo de enseñar sus partes íntimas.
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