TUXTLA / "¿Quién dijo que todo está perdido?

500 Noches, como el ave Fénix, renace entre las cenizas.

"¿Quién dijo que todo está perdido? Yo vengo a ofrecer mi corazón: Fito Páez", dice con letras doradas entre las fotografías de Pablo Milanés y Silvio Rodríguez. En la parte superior dice "500 Noches". Cuando hace casi un año el inmueble se redujo a cenizas por aquel fatídico incendio, la madrugada de un día miércoles, algunos creyeron que el proyecto había acabado... no fue así. Hoy, en un día miércoles, como el ave Fénix el café bar renace entre las cenizas. Hoy reabrieron y el lugar fue muy concurrido. El sitio, convertido en un ícono gastronómico, luce limpio, ordenado, con toques de poesía, de nostalgia. Cualquier pretexto es bueno para volver a casa, tal como dice la placa grabada y colocada a un lado. 

"Que el diccionario detenga las balas, dice en una parte de la pared de madera. A un lado, una bicicleta de turismo color azul, sujetada a la pared como desafiando la gravedad. Cerca hay instrumentos musicales con las imágenes de fondo de los artistas Fito Páez, Silvio Rodríguez y Pablo Milanés. Algunas frases como "entre el espanto y la ternura, la vida canta".

Sí, fue espantosa esa madrugada de miércoles cuando el edificio que albergaba el café bar 500 Noches se consumió por el fuego, pero hoy con ternura ha reabierto sus puertas, y esto es un canto a la perseverancia, a la tenacidad, a la creatividad, al emprendimiento, a la vocación y al servicio.

Finas maderas le dan un toque de elegancia al lugar diseñado con excelente gusto. Los comensales se han dado cita y algunos se ubican en la parte baja, mientras otros buscan la parte alta, donde otra frase de Silvio Rodríguez con letras grandes dice "sólo el amor convierte en milagro el barro". 

Sólo el amor hizo posible que se retomara la esencia y se moldeara de nuevo el diseño y se recuperara la imagen perdida, consumida por el fuego tiempo atrás.

El espacio fue creado pensando en todo y en todos, un área especial destinada a los niños con mesas y sillas de colores tiernos, donde en vez de videojuegos u otros distractores hay material didáctico. Una pizarra dice "bienvenidos".

Máquinas de escribir antiguas se observan en muy buenas condiciones. Dan al lugar un toque de antigüedad y a su lado los vinos añejos, buenos, que esperan el arribo de quienes desean escribir nuevas historias con cada sorbo de café, con cada trago de vino.

En un rincón del hermoso lugar, una máquina de coser, también antigua, acompaña a los frascos que simulan una botica con los famosos elixires curativos de antaño.

Ricardo observa su teléfono, ha llegado un mensaje de texto que dice: "reservación café bar 500 Noches, Tuxtla Gutiérrez, para dos personas". Dice la fecha y la hora. Esto es apenas una muestra del orden y la organización que caracterizan a este lugar y a las personas encargadas de su administración.

Antes de Ricardo, decenas de comensales se han dado cita en la Plaza Dorada ubicada en el bulevar Belisario Domínguez número 1057, Colonia Santa Elena de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. En el mismo lugar, en el mismo espacio que el fuego consumió un día miércoles, como hoy. Sí, como el ave Fénix ha resurgido de entre las cenizas. 

Así lo escribe el conocido reportero Isaín Mandujano, en su publicación: "500 Noches ha resurgido este miércoles 27 de noviembre". Y agradece al equipo y staf del grupo 500 Noches por haberlo invitado a la reapertura.

El lugar tiene poesía y música, literal y simbólicamente. Los detalles de muy buen gusto están salpicados por doquier y ahí se puede suspirar, evocar y contemplar a Sabina, Serrat, Silvio, Gabo, Pablo Milanés... 

En un espacio como recinto sagrado, se observa la imagen grabada de Gabriel García Márquez y un extracto de "Cien años de soledad".

Como el hijo pródigo que un día partió de casa y sufrió lejos del hogar, pero volvió en sí y regresó, hoy muchos han decidido volver a casa. Ésta es la frase grabada en una placa donde dice "Café bar 500 Noches Tuxtla Gutiérrez. 27 de noviembre 2024". Varios optaron por volver a casa hoy. Otros lo harán mañana. 

Los administradores están felices, emocionados. Itzel luce feliz, radiante con la reapertura. Su corazón está impregnado en cada servicio, en cada mueble, en cada platillo, en cada bebida servida.

Y junto con ellos se congratulan quienes de una u otra manera están relacionados, como halfton publicidad y diseño, quienes publicaron "nos complace felicitar a nuestros clientes y amigos del café bar 500 Noches Tuxtla, que hoy abrió nuevamente sus puertas. La comunidad tuxtleca esperó ansiosa este maravilloso día. Que este nuevo capítulo venga con más éxitos y crecimiento para una de las empresas chiapanecas más importantes. Enhorabuena".

Las máquinas de escribir siguen esperando a quienes desean escribir nuevas páginas que hoy lucen en blanco y varios están pensando seriamente en acudir y hacerlo pronto en el café bar 500 Noches. "Hagamos ahí la posada", le propone Alejandra a Carla. Zazi invita a Jorge "amor mío, ¿vamos? y Jorge le dice "claro".

"Vamos por un café", dicen unos. "Vamos por un vinito", dicen otros e incluso Mich le propone a Luis Eduardo "Vamos por una pizza". "Sí, se me antoja un desayuno con cafecito", dice Paz a Efraín.

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Enhorabuena, miles de bendiciones en esta reapertura. Todo delicioso y el lugar siempre espectacular", dice Alejandra. "Hermoso lugar hasta para tomarse fotos", dice Alfonso. "Invítame amor o te invito yo", le dice Mara a Eder Miguel.

500 Noches empieza a escribir una nueva historia, y tú puedes escribir la tuya, hoy, mañana o cuando gustes... 

¿Quién dijo que todo está perdido?